El comienzo de la semana fue con un disgusto. Cuando empezaron a llegar los directivos y docentes para empezar un día de clases normal se encontraron con un panorama atípico.
Durante el fin de semana, se desconoce si fue sábado o domingo, delincuentes ingresaron al establecimiento rompiendo el tejido perimetral de calle Paso. Ya en el patio tomaron un tronco y forzaron una ventana del baño que no tiene rejas.
La alarma del jardín es la única medida de seguridad que resguardaba el ingreso por esa ventana, pero los malvivientes, en cuestión de segundos, reventaron el comando central, cortando la sirena.
Ya más tranquilos, ingresaron a la Dirección, revolvieron toda la oficina y escaparon con una PC de escritorio. Hasta el momento ningún vecino reconoció escuchar la sirena de la alarma durante el fin de semana.
Mientras esperan la llegada de la Policía Científica las clases del turno mañana fueron suspendidas. Las de la tarde quedan supeditadas a los tiempos del peritaje.