El paso de CFC por Deportivo Merlo no sólo caló hondo por lo abultado del resultado (4-1), sino que la dura lesión del delantero albirrojo fue, tal vez, el hecho más preocupante de la tarde del sábado en el Parque San Martín.
En declaraciones a radio NacPop, Ezequiel Morales manifestó que “fue una mala pasada la del fin de semana, pero ahora hay que recuperarse para volver cuanto antes. No queda otra que hacerle frente”.
Sobre su lesión, reconoció que fue “una jugada desgraciada, me caracterizo por ir a presionar en la salida. Un combo de un mal movimiento propio donde se traba la pierna, sumado al golpe del rival, hicieron que termine de romperse. Enseguida me di cuenta que me había quebrado y eso le gritaba a Gastón (Díaz). Al instante sentí la lesión”.
La intervención se realizó el lunes en la Clínica Zabala y “por suerte se dio todo rápido y de buena forma”. Durante su carrera ya sufrió la rotura de ligamentos cruzados, entre otras lesiones musculares. "Igual esta es distinta porque antes era un juvenil y ahora lo estoy viviendo como profesional”, comparó.
"Lo primordial hoy es estar bien, sé que cuento con el apoyo de mi familia y todo el club. Hay que estar tranquilo y dejar todo en manos de Dios y los kinesiólogos”. Por otro lado, se lamentó porque "tuve un muy buen inicio del torneo, pero no me queda otra que estar con la cabeza en alto y buscar volver al mismo nivel o mejor”.
"Mientras pase el proceso de rehabilitación voy a estar en Longchamps, por lo menos las primeras semanas. El kinesiólogo es de la zona, así que voy a acercarme a su consultorio privado para ahorrarme el viaje”, adelantó respecto a la primera etapa de la recuperación.
Morales aprovechó la oportunidad para saludar al juvenil Nicolas Golomba, quien anotó el primer gol de su carrera en la caída ante el elenco de Merlo: "Lo felicito por su primer gol en Primera, que disfrute y aproveche esta posibilidad”.