La Secretaría de Deportes ofreció a los dos clubes de básquet de la ciudad, Juventud y Cañuelas, que retomen los entrenamientos presenciales en el playón de Los Aromos. En el caso de Juventud Unida, esta opción fue rechazada e insisten con entrenar en el microestadio de Avenida Libertad y Sarmiento. O por lo menos, esa es la opinión de Matías Vicente, base de la primera división del "verde" que habló en la FM88.1.

El club presentó un estricto protocolo ante el gobierno municipal para retomar las prácticas en el "Vicente Polítano", pero hasta el momento no fue aprobado basicamente porque no están permitidas las actividades deportivas bajo techo. "Es un tema de la dirigencia, ya no es mi terreno. En mi opinión, porque es un lugar cerrado, y no corre aire”, señaló Vicente.

El "plan B" del municipio es que lo hagan en un espacio público como el predio de la Sociedad de Fomento Los Aromos, pero tampoco convence. Vicente habló de la inseguridad en Cañuelas y dijo no sentirse seguro entrenando en un barrio, al aire libre, aún teniendo en cuenta que en la misma manzana, en la esquina de Brasil y Entre Ríos, hay un container transformado en puesto policial, con presencia de efectivos las 24 horas.

Expresó que por cuestiones laborales de los jugadores solo podrían entrenar de noche y considera que no están dadas las garantías para hacerlo. "El horario va a ser siempre de noche, y no creo que haya un control que nos de seguridad entrenando. No nos ofrecen que nos cuiden, y vos sabes lo que es Los Aromos. Si me dicen de ir a entrenar a Los Aromos, yo no voy”.

Además, según la óptica de Vicente entrenar sobre cemento implicaría un costo material innecesario, por el desgaste de los balones profesionales que son confeccionados para usarlos en pisos de parquet. “No se puede entrenar ahí, no es lo mismo, las dimensiones de la cancha, el pique de la pelota, es otra cosa", argumentó Vicente en NacPop.

Y hasta se animó a trazar una analogía entre los bares y el básquet, “Esto es como los bares, si ellos pueden abrir, nosotros con los protocolos estrictos también. Entiendo que es su trabajo, pero en espacio es lo mismo. Si nos vamos a contagiar, va a pasar igual”.

Sobre la etapa de recambio de entrenadores que atraviesa Juventud, con la salida de Marcelo Petre y la llegada de Diego D'Andrea, Vicente dijo que "son cambios, no es algo malo. Las modificaciones son a largo plazo, debemos esperar a ver como madura y evoluciona” el nuevo ciclo.

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