En el Centro Provincial de Atención de la Salud Mental y Adicciones de Cañuelas siguen atentamente la evolución del aislamiento social, preventivo y obligatorio producto de la pandemia de coronavirus. Desde el organismo brindaron una serie de precisiones relacionadas el actual contexto a través de una de sus profesionales, Silvia Reale.
Lee las principales declaraciones:
-“Hay un incremento de un 80% de consumo de alcohol y 30% de psicofármacos. Recurren al consumo de sustancias legales que están disponibles en el mercado”.
-“La abstinencia de las personas que consumen y no pueden hacerse de ese producto debido al aislamiento recurren al consumo de alcohol o tienen conductas agresivas o violentas. Nos preocupa mucho la violencia intrafamiliar que se genera, es lo que empieza aflorar, no solo en el paciente sino en toda la familia”.
-“Hay personas que puedan adaptarse a estas situaciones, a las estrategias de calmar la ansiedad mediante el deporte y la salida, pero como eso no podemos hacerlo, estamos empezando a ver un aumento en el consumo de alcohol y estupefacientes en personas que por ahí no tenían un consumo problemático”.
-“Algunos pueden reinventarse y comenzar rutinas saludables. Pero a otros la adaptación no les funciona y producen inestabilidad emocional, recurren al alcohol y se genera una tensión que se comienza a agravar”.
-“Hay diferentes manifestaciones que dan cuenta de nuestra fragilidad y vulnerabilidad ante algo desconocido, que nos irrumpe y nos hace cambiar la vida a algo que se nos presenta como amenazante”.
-“Nuestra sensación de algo nuevo se nos presenta amenazante y tenemos que reconocer que en las personas que atraviesan una enfermedad como la adicción y el consumo problemático, la fragilidad es mucho mayor por la cuestión de lo que produce el consumo a nivel orgánico. Es una población que necesita la sustancia y por ahí por necesitar esas sustancias se enferman y tienen conductas más complicadas”.
-“Si bien en general en toda la población sentimos y tenemos estrés, miedo, sorpresa, incertidumbre, enojo e inseguridad, en la población involucrada en el consumo de sustancias el estrés y la ansiedad se pueden manifestar mucho más fuerte”.
-“Nosotros estamos con una línea telefónica haciendo guardia, porque creemos que debemos brindar el acompañamiento a las personas que estaban siguiendo un tratamiento. Tenemos un teléfono del centro: 423-600, y por otro lado, un contacto para toda aquella persona que tenga alguna situación de ansiedad, estrés y angustia las 24hs: 0800-222-5462”.
-“Empiezan a aparecer todos estos cuadros patológicos. A algunos pacientes el asilamiento les ha favorecido y a otros les ha agravado el consumo”.
-“Es importante cuidar el exceso del consumo de alcohol y medicación. Y evitar el consumo excesivo de té, café o de bebidas energizantes porque aumentan la ansiedad. Y es muy importante poner la situación en palabras, porque es un momento inédito, y estas rutinas nos van a ayudar a llevar adelante el aislamiento”.
-“Hay diferentes tipos de familias. Hay familias problemáticas que generan climas tensos y no ayudan. Otras que pueden contener, ayudar, y aliviar el malestar del paciente abriendo un espacio de escucha, preguntándole qué le pasa, cómo se siente”.
-“Esto es un antes y un después. Sabemos todo lo que pasa dentro de las familias, pero es importante que se queden en casa. Lo más traumático es lo que se va a venir, por eso no se queden solos, estamos en contacto y a disposición”.
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