Mientas la población culmina con la primera cuarentena impuesta por decreto por el presidente Alberto Fernández y comienza la segunda hasta el domingo 12 de abril con el claro objetivo de aplanar la curva de contagio, el municipio de Cañuelas trabaja en la incorporación de lugares y camas para recibir enfermos leves, pero que deberán ser aislados para que el virus no se siga propagando.
El Hospital Regional asumirá la atención de los casos más graves y para eso se reacondicionó en todo su interior, justamente por considerarse como el centro regional mejor equipado para aislamiento y tratamiento de la enfermedad por los Ministerios de Salud de Nación y Provincia.
En ese sentido cabe destacar, que el nosocomio contará con una ampliación de 60 camas de aislamiento y 20 camas de terapia intensiva, llevando su capacidad al doble que en la actualidad.
Además, la intendenta Marisa Fassi anunció que funcionará otro centro de atención en las instalaciones de la Asociación Civil “Por un Nuevo Mundo”. Allí habrá un total de 50 camas para la atención de los pacientes afectados por el Covid-19.
La mandataria también recorrió las instalaciones del gremio Smata en Alejandro Petión. Allí el sindicato puso a disposición del gobierno local su hotel con 300 camas, más la capacidad que tienen los dormís y el chalet con 18 camas más.
Pero si hiciera falta, también esta la opción de disponer del salón de eventos, dónde se podrían llegar a instalar 900 camas más.
A su vez, durante la semana pasada el predio de Oblatos Diocesanos en San Esteban se sumó a las instituciones que brindarán sus intalaciones. La residencia cuenta con 25 habitaciones de dos camas cada una.