Por medio de un decreto firmado por la intendenta Marisa Fassi, hasta el 31 de marzo, se suspenden todos los eventos que se desarrollen en los establecimientos habilitados, inscriptos y autorizados de los rubros salón de eventos, confiterías bailables o similares.
Así también cancela obligatoriamente las actividades de los centros deportivos y clubes, salas de juegos, gimnasios, natatorios, ferias de todo tipo y canchas de futbol en general.
La medida también establece que los locales gastronómicos, bares y similares, deberán reubicar sus mesas a una distancia prudencial mínima de un metro y medio entre las mismas; debiendo cumplir acabadamente con las recomendaciones sanitarias preventivas con respecto al COVID-19.
Aquellos que no cumplan con las directivas son pasibles a recibir multas económicas de hasta 123.260 pesos (1000 módulos de $123.26), clausura del negocio o revocación de habilitación.