A un mes de su fallecimiento, el padre Walter Bejarano decidió exponer con material compaginado desde 2016 -año en que fue desplazado como cura párroco de la Iglesia Nuestra Señora del Carmen y apartado de la actividad sacerdotal por el obispo Gabriel Barba- una serie de publicaciones que dejó programadas en su portal.
Con 46 años Bejarano falleció el pasado 18 de noviembre por un derrame cerebral sufrido en Galicia, pueblo de España donde decidió alojarse para continuar con sus tareas en el sacerdocio. El 19 de diciembre, en su blog personal se publicó una memoria póstuma con un mensaje que promete dilucidar un potencial mar de acusaciones, misterios y campañas de desprestigio encabezadas por su propia hermana y el obispo Barba.
El primero de los audios que trascendió consiste en una conversación de Bejarano y Fabián Ureña -vicario general y director de los Oblatos Diocesanos- apuntado por el entorno del padre Walter como el mensajero de Barba para apaciguar las aguas.
En dicho audio del 10 de diciembre de 2016 (insertado en esta nota) Bejarano reconoce en una charla telefónica la angustia y la tristeza que lo embargaba por ser corrido abruptamente de Cañuelas sin justificación alguna, ensuciando su buen nombre y honor.
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A su vez, Bejarano señala que no puede acercarse al Obispado por recomendaciones médicas y que los espera en la casa de su tía en Escobar, donde estaba parando transitoriamente, para conversar y empezar a descular los verdaderos motivos de su desplazamiento fundamentado, según la diócesis, por malos manejos. “Estoy hecho mierda. Estoy mal de la cabeza. Mi hermana armó todo este problema con el obispo (Barba)”, señala apesadumbrado Bejarano.
Los amigos de Walter afirman que su hermana Silvana y Barba mantienen de vieja data una relación muy cercana y que por motivos todavía desconocidos (pero certificados en futuras publicaciones) habrían tramado una campaña de desprestigio para alejar a Bejarano del obispado.
La primera memoria subida a la página walterbejarano.blogspot.com a un mes de su muerte se titula “La voluntad” y es el primer capítulo de una historia con
“La voluntad”
diciembre 19, 2018
Queridos hermanos, a un mes de mi fallecimiento, entregue el manejo de mis redes sociales a una persona amiga, todos y nadie saben quién es, muchos imaginan, especulan, en fin..¿eso importa ahora?
Mi voluntad es, si soy cremado por voluntad de estos y otros tantos miembros de la iglesia, ¡que remedio! ¡No es mi voluntad! ¡Pero seguramente eso harán! Quiero que entreguen mis cenizas a Daniel Tejo Guridi, amigo! ¡Cómplice! ¡Compañero! ¡Hermano! Junto con unos documentos del Obispado Gregorio de la Ferrere.
Y públicamente me niego a que mi hermana Silvana Marcedes Bejarano, o el que se dijo ser mi amigo, pastor, hermano y obispo Gabriel Barba, decidan sobre mis últimas voluntades. Todos se preguntarán ¿porque? Tranquilos, no coman ansias, ya les iré contando...
No soy brujo, pero les aseguro que hoy estarán llegando mis cenizas a la ciudad de Buenos Aires ¡Mi Buenos Aires querido! en manos del que también creí amigo! Christian Ferraro, irremediablemente manipulado por mi hermana Silvana ¡ay Silvana! que decirte, espero que Dios te ilumine y te de la gracia de conocer la bondad ...algún día...todo es posible.
Seguramente como a tantos sorprendí enviando “el anuncio del fin” el día de mi partida, a pesar que lo escribí días antes, también he de sorprender hoy!
Y los seguiré sorprendiendo con mis historias, vivencias, algunas tristes, otras alegres pero
cristalizadas.
Epitafio: "La muerte no es más que un cambio de misión" Tolstói.
“Dios Proveerá la leña y el cabrito”
Les dejo todo mi amor y bendición!
Padre Walter J. Bejarano