Todo comenzó hace dos semanas cuando un camión que circulaba por Hipólito Irigoyen se llevó puestos los cables en la intersección con República Oriental del Uruguay.
A partir de ese momento, todo el cableado y los postes penden de un hilo y están a punto de caerse. Sin bien todavía no hubo cortes de energía, los vecinos llevan varios días de reclamos ante la empresa Edesur, que no ha dado ninguna respuesta.
Cabe destacar que la calle fue cercada por una cinta roja de peligro en la tarde de este miércoles por los Bomberos Voluntarios, pidiendo que la empresa se haga responsable del desperfecto para solucionarlo.
Desde Edesur destacaron que el reclamo ya está en manos de los encargados de autorizar a las cuadrillas de emergencia, que dependen de otras dependencias para su solución final.
Los comerciantes de la zona destacaron que durante 2017 los problemas fueron continuos y que al actual cuadro de situación se le debe sumar las altos valores de servicio verdaderamente deficiente.