A raíz de la denuncia de varios residentes del corredor de Ruta Nº 3 (principalmente en Los Pozos y Santa Rosa) que aseguraron ver alacranes en las inmediaciones del jardín 910, el área de infectología del hospital Ángel Marzetti dio a conocer una serie de puntos para cuidarse de la alimaña.
Según las estadísticas del Ministerio de Salud de la Nación la mayoría de los accidentes con alacranes se producen en los domicilios, por lo cual las medidas de prevención deben estar orientadas a evitar el ingreso de los mismos a la casa.
Periódicamente, los habitantes deberán revisar y sacudir prendas y calzados a la hora de vestirse; sacudir la ropa de cama antes de acostarse o acostar un niño; examinar cajones o estantes; y evitar caminar descalzo en el patio.
Dendro del hogar se recomienda colocar rejillas en desagües o respiraderos, colocar burletes en las puertas y reparar grietas en paredes y techos. En exteriores, realizar aseo periódico; efectuar control de la basura para reducir la cantidad de insectos (arañas y cucarachas) que sirven de alimento a escorpiones; evitar acumulación de materiales de construcción, escombros y leña.
Frente a eventuales picaduras, no realizar tratamientos caseros. Aplicar hielo y consultar rápidamente al médico y en lo posible, con extremo cuidado, capturar al alacrán en un recipiente, sin tocarlo, y llevarlo al hospital para ser analizado por el personal de salud.
A grandes rasgos, el alacrán peligroso es de color amarillo o marrón claro, de cuerpo alargado, con pinzas largas y angostas; con cola telson con apéndice. El no venenoso es de color negro o marrón oscuro, pinzas cortas y anchas, y cola sin apéndice.