Los centros de atención y emergencias no gozan de buena salud y las decisiones del actual gobierno no dan tregua. Los trabajadores del Centro Especializado en Salud Mental Laura Bonaparte fueron notificados el viernes sobre las interrupciones de servicios y hoy realizaron un abrazo simbólico. Además, muchos siguen firmes colaborando con los pacientes. Guillermina González, trabajadora social del lugar, charló con Radio NacPop.
“Nos informaron el viernes y el lunes nos vallaron. Por eso, decidimos hacer una vigilia. Por el otro lado, había gente internada y los que estuvimos seguimos atentos a la guardia. Como profesionales, a pesar de estar sin certezas de contratos, defendemos a nuestros pacientes”.
“Estamos en situación de alerta en la Salud, como pasa en el Garrahan. El gobierno ya informó que los ocho hospitales pasarán a cada jurisdicción, estamos muy preocupados”, agregó la profesional del hospital ubicado en el barrio porteño de Parque Patricios.
En el lugar, hay 60 camas asignadas para internaciones. El centro médico ya tuvo 25 mil consultas en lo que va del año y allí trabajan cerca de 600 trabajadores, entre profesionales y no profesionales. Pero además, hay un 0-800 y una guardia que atiende las 24 horas.
“Los sectores de salud mental no somos suficientes, pero los que nos dedicamos a esto, vamos a tener que cerrar por el presupuesto que manejamos. Además, no hay casas de medio camino, ni residencias o departamentos”, alarmó González.
“Fueron por las obras sociales y las prepagas. En Avellaneda, por ejemplo, crecieron las consultas de salud mental un 30%. Y en Capital, en la parte de ‘adicciones’, se cuadriplicó la demanda”, indicó la trabajadora social.
Y reconoció que “cerraron un servicio comunitario en el barrio Zabaleta de manera intimidante. Después, hubo 30 despidos y los gremios UPCN y ATE nos dijeron que no llamáramos la atención”.
Ante la situación que es desesperante, expresó: “Empecé a trabajar acá en el 2010, el hospital es parte de mi identidad. Las personas que hacen tratamientos ambulatorios tienen mucho miedo y tratamos de tranquilizarlos”.
“Hay que sostener las medidas y no aflojar. Si el Ministerio no ofrece respuestas, vamos a seguir en la lucha”, aclaró la profesional.