El rincón natural patagónico arde hace una semana y ya se ven comprometidas casi 3.000 hectáreas según la información oficial. Encima, los vientos de 40 km/h y el calor sofocante terminan siendo enemigos en la lucha para paliar los focos que se iniciaron de manera intencional: “La pérdida es irreparable, van a costar varias décadas para que el bosque volver a regenerarse”, contó Gajardo en exclusiva.
“El incendio viene activo desde el jueves pasado a la noche. Al día de hoy son 2.835 las hectáreas que se estiman afectadas de bosque nativo, especialmente, especies pertenecientes al bosque andino patagónico. Están combatiendo aproximadamente 350 personas, entre bomberos y brigadistas forestales, entre lo que es la línea de fuego y apoyo”, detalló la secretaria Gajardo.
Además contó que “está colaborando un dispositivo aéreo conformado por tres helicópteros, dos aviones hidrantes, un avión de observación y un avión anfibio que tiene una frecuencia de recarga más importante”, agregó la especialista en los espacios verdes.
La pregunta obligada, sobre el extremo calor en todo el país, tuvo una respuesta lapidaria: “las altas temperaturas no han sido del todo beneficiosas en estos días, a la situación agobiante se le sumó el viento y debido a la topografía de la zona del Parque se complejiza un poco el trabajo en el territorio”.
“Se ha solicitado la asistencia de nuevos agentes en el terreno, brigadistas forestales específicamente, que se gestionaron al Servicio Nacional de Manejo del Fuego, Y entre los últimos tres días hemos recibido el apoyo de gente de Córdoba, Misiones y ayer llegaron 50 brigadistas de la provincia de Buenos Aires”.
La especialista le dijo a NacPop que “se presume que el incendio es intencional, de todas maneras, en este momento es materia de investigación las causas, pero cuando inició el fuego la semana pasada se vio un modelo de prendimiento muy parecido a lo que se observó el año pasado en el incendio grande que se registró en ese mismo lugar, que afectó 1.200 hectáreas”.
“La pérdida es irreparable y va a costar mucho tiempo, muchas décadas, para que el bosque vuelva a regenerarse en la forma en la que estaba”, indicó Cecilia Gajardo, quien agregó a su informe: “Las comunidades de las ciudades que están cercanas no se están viendo afectadas por un peligro de que pueda avanzar el incendio, sólo por el humo, y se está trabajando fuertemente en las zonas cercanas de los pobladores rurales para resguardar la infraestructura y todo lo que significa vivir en el campo”.