El calor no da tregua. La calle es un infierno desde temprano y a la noche no hay brisa que valga. El Licenciado Cristian Giacomino, palabra calificada en cuanto a la Nutrición Clínica y Deportiva, entregó algunas recomendaciones para seguir muy de cerca. Atentos: el agobio seguirá hasta la próxima semana.
De acuerdo a lo informado por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), estas temperaturas, que en varias ciudades alcanzan los 40 grados, "pueden ser peligrosas, sobre todo para los grupos de riesgo, como niños y niñas, personas mayores de 65 años, con enfermedades crónicas". El calor afecta a Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fe, Córdoba, parte de San Luis, norte de San Juan, La Rioja, Tucumán, Santiago del Estero, Corrientes, Misiones, Formosa, Chaco y Salta.
“Hacer actividad fuera del horario de la mañana o tarde por la noche, no tiene sentido porque el cuerpo se desgasta de manera innecesaria y no logra recuperarse. Somos una máquina perfecta, pero que trabaja dentro de parámetros”, contó Giacomino.
Y llamó la atención: “Suponete que sos un deportista de elite y yo un hombre sedentario que intento bajar un par de kilos. Si no me muevo, puedo llegar a tener alguna patología como principio de hipertensión o azúcar alta en sangre, son parámetros que hay que controlar sí o sí”. Y agregó: “Si te pongo a correr a las dos de la tarde, por más que seas un gran deportista, vas a rendir menos”.
El especialista, que tiene su consultorio en Lobos, afirmó que los chicos de dos años a recién nacidos son los más susceptibles porque tienen un nivel de agua elevado, entonces con estas temperaturas se ven atacados por la deshidratación. En tanto, en los abuelos, el problema es que el deseo de la sed empieza a desaparecer con el paso de los años: “Nosotros tenemos un 70% de agua en promedio, un bebé hasta el año, año y pico, un 90% de agua, en un adulto mayor ese 70% ya no existe más. Tiene un 4 0 5 % menos de agua y en cualquier exposición esa diferencia de agua más la temperatura es tremenda”.
El deportólogo puntualizó en este sentido: “Es importante tomar agua. Y hay que distribuirlo durante todo el día. Los que trabajan en un escritorio, siempre tiene que tener una botella encima y hasta no verla vacía no hay que dejarla. Nuestro cuerpo es igual que un auto: si al auto le falta agua, va a levantar temperatura; si a nosotros nos falta agua, vamos a levantar temperatura”.
En la misma línea, resaltó que se refiere exclusivamente al consumo de agua, y que no hay que confundirlo con infusiones como el mate, café o té: “Si te tomás un termo entero, no sirve en estos casos de extremo calor, ya que el cuerpo solamente extrae los taninos y el resto se va por la orina”, puntualizó el especialista.
Ahora bien, ¿qué se come en esta época?: “Fideos simples, ensaladas, una milanesa de pollo con ensalada. Hay que sacar todo lo que aporta calorías excesivas... evitar las 'comidas de olla'. Nuestro sistema está direccionando la sangre para bajar la temperatura, entonces, si comés pesado, aportás más calor”.
El profesional sugirió que la exposición al sol tiene que ser luego de las 16.30 horas y las actividades deportivas hasta las 10 en horas de la mañana y luego de las 19.30 por la tarde: “Y en el caso del ‘fulbito’, donde hay un gran desgaste, hay que dejarlo para las 10 de la noche”.
