En mayo de este año, el profesor denunciado por abuso sexual simple fue sobreseído definitivamente. Después de cinco años de iniciada la causa la justicia no halló pruebas en contra del docente que, por estatuto, fue oportunamente apartado de las aulas para realizar tareas administrativas mientras esperaba una veredicto del caso.
Al conocer la resolución, la familia decidió hacer un descargo en NacPop sobre lo que considera un “triste dictamen”, que habilita al docente a retomar el dictado de clases, libre de de culpa y cargo.
LA CARTA DE LA FAMILIA DE LA MENOR:
“A quienes lean estas palabras, que no pretendo que comprendan, ya que la empatía en muchos no existe, pero que hay hechos muy dolorosos que a lo mejor solo los que pasamos por esto nos puedan comprender .
En un país donde somos literalmente manoseados por la justicia, donde los jueces liberan a abusadores, violadores, asesinos, ladrones, donde la mayoría de los jueces son corruptos, que podríamos esperar mas que un TRISTE DICTAMEN .
Frente a las expresiones mediaticas con respecto a un fallo de un sobreseimiento de un abuso deshonesto por faltas de pruebas . Duele ver que para una jueza las declaraciones de una nena de 6 años no fueron suficientes , las palabras de su abuso no alcanzo .
Y ahí una se pregunta
¿Las palabras de un niño no cuentan?
¿La angustia y llanto de vivir este episodio no cuentan?
¿Qué mas necesita una criatura demostrar, mas que describir lo sucedido?
Como mamá, siempre fui con la verdad y sobre todo siguiendo los pasos de la justicia. No me hubiese perdonado nunca no haber hecho nada por mi hija, trate de hacer todo lo que cualquier mamá hubiera hecho ante una situación como esta, denunciar, acompañar, contener, pero sobre todas las cosas CREER. LOS NIÑOS NO MIENTEN.
Fue todo muy difícil, que después de enfrentar y buscar ayuda ,sobreponerse con todo lo que ello implica, un proceso judicial, donde pasas por entrevistas, audiencias, y cámara Gesell ha llegado a su final.
Gracias a este episodio mi hija ese año perdió su sonrisa, se llenó de miedos y de angustias, no quería ingresar al colegio, lloraba constantemente.
Con la ayuda de nosotros y del amor de la familia, ella pudo salir adelante y nosotros tenemos paz de que hicimos las cosas bien.
No exponemos a nuestra hija a nada que le haga mal.
No nos victimizamos.
No gritamos nuestro dolor.
No ponemos ningún comentario faltando el respeto.
Hija: Detrás de esta denuncia hay una familia que te ama, que cada lagrima derramada dea poco va a ser sanada aun sabiendo que la herida se cura pero las cicatrices quedan y que esto es un mal recuerdo.
PALABRAS DE MI HIJA: “OJALA MAMÁ ESTO NO LE PASE A OTRO NIÑO”.