En la noche del viernes, mientras Victor "Peteto" Caeiro y su esposa, Graciela Indaverea, cenaban en el comedor del hogar de Brandsen y Acuña, fueron sorprendidos por el ingreso de dos malvivientes.
Después de revisar durante media hora cada recoveco de la casa, escaparon con plata en efectivo, una cámara de fotos, una notebook y una TV que tomaron de una de las habitaciones.
Cuando los dos ladrones salieron del chalet, un vecino se percató que se trataba de un robo y los salió a correr. Los cacos escaparon hacia Belgrano, dónde los esperaba un auto para darse a la fuga.
Según el parte policial las víctimas declararon que no fueron golpeadas ni amedrentadas con armas. Graciela fue amordazada y debió ser atendida por un pico de presión producto de los nervios.
También se presume que los malhechores podrían haber estado dentro del domicilio cuando llegó la pareja de jubilados, que había salido por unos minutos, sin conectar la alarma.
De acuerdo a averiguaciones practicadas por la policía uno de los sujetos habría sido identificado y sería el mismo que en septiembre habría perpetrado un hurto en la casa de enfrente a la de Caeiro. El apuntado tiene 16 años.
Una hora antes del hecho, los vecinos habían llamado al 911 para advertir movimientos extraños de un automóvil, que merodeaba el barrio.