Diego Motos cumplió con uno de sus desafíos más importantes. El domingo 9 de noviembre, subió los 62 pisos del Sky Costanera de Santiago de Chile, el rascacielos más alto de Sudamérica. Fue en el marco de la competencia internacional “Corremos por la Vida 2025”.
El evento congregó a los bomberos de distintas partes del mundo con la idea de concientizar sobre la importancia de la buena salud física y emocional. Además, busca promover la donación de órganos y acompaña las campañas de la lucha contra el cáncer.
“Representé a la Argentina y me sentí muy contento por el logro entre 2.400 bomberos. Fueron 300 metros de altura. Mi objetivo no fue personal, tomé la responsabilidad de entrenar y llegar a la meta por los demás”, dijo Diego, que trabaja en el cuartel de Quilmes y se contactó con NacPop para transmitir su experiencia.
Y dejó un mensaje alentador: “Se dio un ascenso eterno donde el verdadero desafío no fueron las piernas, fui yo mismo. Cada escalón era esa pelea interna entre parar o seguir, pero para esto me preparé todo el año. Para demostrarme que la disciplina siempre pesa más que el cansancio. Cada escalón cuenta, cada segundo importa. No siempre gana el más fuerte, sino el que no se rinda”.






















