Sebastián Gambetta está en la retina de los hinchas de Cañuelas FC. El ex arquero del Ascenso, que pasó por el CFC y dejó su huella en el equipo de Osvaldo Ruggero que ascendió de la ‘D’ a la ‘C’ y terminó festejando en el desempate contra Sportivo Barracas (2-0) en la cancha de Chacarita, ahora ocupa un lugar especial en Huracán como Coordinador de la Carrera de Entrenador de Arquero y como entrenador de la Reserva.
“En 2023 estaba en Quilmes con los arqueros de Primera, pero por los aumentos, se me complicaba viajar hasta la ciudad. Decidí buscar otro rumbo, pero Leonardo Griffo me recomendó en el ‘Globo’. Ahí nomás me contactaron Gastón Coyette y Daniel Vega para ser parte de la estructura de la Reserva. Luego, se fue moldeando la carrera”, contó Gambetta, que también atajó en Atlanta, Lamadrid, Gimnasia y Tiro de Salta, CADU y Flandria.
En el arco del Tambero.
En este nuevo rol, se dio el lujo de tener como alumno a Hernán Galíndez, “1” de Huracán y de la Selección de Ecuador: “Me sorprendió que quisiera anotarse. Es un orgullo que un profesional con tanta trayectoria elija capacitarse con nosotros”. Y devolvió: “Es buen alumno. No es fácil hacer una carrera con tantos viajes y partidos”.
El papel de Gambetta en el Ducó es muy importante. De hecho, propuso la creación del Departamento de Arqueros Juveniles, algo nuevo en Parque Patricios.
La carrera, en sí, dura un año y se divide en Licencia “A” y “B”. En la primera mitad se apunta al entrenamiento infanto-juvenil y en la segunda parte al fútbol de alto rendimiento. Existen cuatro áreas: la médica, la psicológica, la física y la técnica.
“Gracias a la creación de esta carrera, los entrenadores de arqueros logramos tener un respaldo académico para estar a la altura de las demandas del fútbol actual. Además, nos brinda un carnet para trabajar en los clubes asociados a la Conmebol”, contó Sebastián, quien en el cierre de ciclo habló junto al presidente del club, Abel Poza, y la directora de la Escuela, Patricia González.
Y recordando su paso por el “Tambero”, dijo: “Pasé momentos hermosos, todavía tengo amigos de ese plantel, cuando hablo con gente de la ciudad me tratan muy bien. El CFC creció mucho”. Y no cerró la puerta: “Siempre es lindo volver a los lugares donde te tratan bien”.