Len Cole era el Director General, pero ante la salida de González, decidió renunciar. Pero vaya sorpresa fue recontratado como asesor. El que mantuvo su puesto fue el Gerente Artístico, Charly Durignoni. Ambos forman un dúo inseparable y para el puesto que antes era de Cole, decidieron que el mejor nombre era el de Josema Quijano, pareja de Durignoni. Todo queda entre amigos y familia.

La gestión de Cole, pero especialmente de Durignoni (el que está al mando de la programación), le dieron al canal estatal los peores números de su historia en materia de rating. Casi ningún programa de los que inauguró, superó un pico de un punto. Es un canal apagado.

Durignoni es un empleado de planta del canal, con muchos años en la emisora. Muchos de sus ex compañeros, que ahora lo sufren como jefe, están furiosos por su cambio de actitud y, claro, otro motivo de enojo es sueldo millonario contra el deteriorado ingreso de los trabajadores, que no tienen aumento desde hace más de un año.

Con Cole algo corrido, y la escasa influencia de Quijano, Durignoni decidió que era hora de lanzar los programas que viene preparando hace tiempo en sociedad con productoras independientes: la gran apuesta es "Siempre hay música", conducido por Cucho, de los Auténticos Decadentes. La audiencia fue esquiva, 0.3 de rating, casi nadie lo vio.

Las noches en la semana fue otra iniciativa de Durignoni. Estrenó 'La noche es nuestra", con Diego Ramos y Majo Martino. El mismo resultado, números ínfimos de audiencia.

Otro motivo de enojo en los pasillos del canal es que los acuerdos con productoras independientes suelen estar viciados de acuerdos comerciales no santos. El Gerente Artístico, que antes criticaba estos convenios ahora los apoya, ya quedó en la mira.

Volvemos al arranque. Defendemos la TV Pública, pero es cierto que con este tipo de conducciones, se hace difícil sostenerla. Es tiempo de cambios.