Un plus más. Sumado a los controles típicos de temperatura y sintomas, la Primera División de Hockey de Las Cañas puso en práctica un novedoso requisito para ingresar al primer entrenamiento. Todas las que llegaban al predio debían responder un examen de conocimiento sobre Coronavirus.
Es obligatorio y deben responderse correctamente las 10 preguntas. La evaluación tiene infinitos intentos y se hace repetidamente hasta no tener equivocaciones. Sabrina Aguirre, miembro de la Comisión Directiva de Hockey contó cual es la intención: “Deben contestar correctamente las 10 preguntas, y la intención es hacerlo la cantidad de veces necesarias hasta que salga bien. Apostamos a la incorporación del conocimiento básico, en el ensayo-error. Yo personalmente lo hice 3 veces".
El resto del protocolo es semejante a la de los otros deportes y espacios comerciales que ya fueron habilitados, con control de temperatura, higienización constante de manos y elementos, utilización obligatoria del barbijo y distancia social. Sabrina Aguirre, parte de la Comisión Directiva de Hockey, lo explico de la siguiente manera: “Tenemos un súper protocolo, con todas las medidas y prevenciones estipuladas. Desde lo colectivo, hasta lo personal”.
Previamente a esta posibilidad de retornar presencialmente, las prácticas se hacían de modo virtual. En el principio del aislamiento social preventivo, lo hacían dos veces por semana en todas las categorías, pero después pasaron a hacerlo simplemente uno porque "era difícil mantener el entusiasmo”.
Ahora en la actualidad pueden entrenar en la cancha, y al aire libre. Pero con la excepción, de que no tienen permitido hacer uso del palo. Solamente les está permitido entrenar fisicamente, sin elementos. Mientras cada una está en su corralito personal, ya que la cancha fue dividida en 15 partes. El número de subdivisiones que se realizaron, corresponde a la cantidad de jugadoras que hay en cada uno de los dos turnos, que presentan los dos días de prácticas.
Aquello que respecta a lo económico. El club se solventa de la cuota de los socios y así afronta los costos administrativos como: la luz por entrenar en horario nocturno, elementos de higienización, mantenimiento del predio. De todos modos, Aguirre describió su accionar: “Tratamos de juntar la plata de donde se pueda, pero no vamos a impedirle a una jugadora que no venga a entrenar si no puede costear la cuota. Comprendemos que es una situación difícil para todos”.