A finales del año anterior, CFC obtenía el Apertura, y con ello una de las mejores posibilidades de su historia. Entre sus filas, estaba el lateral derecho Julián Cano, quien sigue siendo parte del plantel profesional. Su hermano, Germán, se destaca en el Vasco da Gama brasilero.
“La máquina del gol”, así fue como lo apodo la FIFA desde una de sus publicaciones, al informar un gol de su autoría. El goleador inicio su carrera en Lanús, pasó por Chacarita y Colón. Pero al poco tiempo emigró a Colombia, donde obtendría sus mejores rendimientos.
Al llegar al país “cafetero” su destino inicial fue Deportivo Pereira, donde tuvo un buen presente. Pero al poco tiempo se mudaría a Paraguay, donde tendría un paso fugaz por Nacional. Aunque sin lugar a dudas, el despegue y su mejor versión se vio en Independiente de Medellín, institución a la que arribo tras jugar en la liga paraguaya.
Allí en Medellín, es dos etapas (2012-2014, 2018-2019) Germán se convirtió en el máximo goleador de la institución, alcanzando 129 anotaciones y logró ser el máximo artillero en seis campeonatos. “A Colombia le debo mucho, fue el lugar que me permitió explotar como jugador. Es un honor para mí ser el máximo artillero histórico, en un club con más de 100 años de historia”, señaló Germán Cano en el aire de NacPop.
Incluso Germán llegó a ser considerado para la Selección Colombia, en su momento dirigida por José Pekerman. Su nacionalización no prosperó y sumado a la alta competencia que había en el puesto, la posibilidad se truncó.
Su historial deportivo se completa con pasos por México, en León y Pachuca, y en este 2020 anormal viste la camiseta de Vasco da Gama, en el fútbol brasileño: “Es un estilo de fútbol que me sorprendió, siendo el más difícil en el que estuve. Después viene el argentino”.
Una de las marcas que “la máquina del gol” busca romper, es la de ser el primer extranjero en ser goleador del campeonato brasileño, luego de casi 50 años. Esta fue una marca inquebrantable en el medio siglo pasado. El único en lograrlo, fue Pedro Rocha en 1972. Sobre esto dijo: “Falta mucho por jugar, pero obviamente que deseo alcanzarlo”.
Sin embargo, Cano hablo de sus orígenes familiares, futbolísticos, y la relación con Julián: “Con Juli éramos compañeros en el equipo de barrio, pero al llegar a casa, jugábamos uno contra uno y nos matabamos. Jugábamos en Barrio del Plata al baby futbol”.
“Ya desde chiquito estábamos los dos en Lanús, y nos levantamos muy temprano para ir a entrenar. Yo tuve que abandonar la escuela para continuar con mi carrera, pero no se lo recomiendo a los chicos. Deben enfocarse tanto en el fútbol, como en los estudios”, reconoció el goleador.
Además hablo sobre su regreso a Argentina: “Si volvería a un club, seria a Lanús. Pero sé que mi futuro no está en Argentina, por más que me duela decirlo”.
Para finalizar, narró como lleva a cada rincón del continente la costumbre del asado. “A cada lugar donde voy , llevo el asado, el último se lo hice a Martín Benítez (ex Independiente) por su asistencia. También hice asado en la casa de James Rodríguez y a Juan Quintero (ex River). Ambos son dos tipazos”.
