Al inicio de la cuarentena obligatoria, Moreno estaba en una residencia ubicada en la Ciudad de Buenos Aires que no le prestaba las mejores comodidades para hacer actividad física. Por dicho impedimento, debió esperar para poder venir a Cañuelas donde su hogar le da mayores prestaciones para moverse.
Pero ahora que se reabrió la actividad tenística, Florencia retomó las prácticas y se entrena en el Centro Asturiano de Buenos Aires. Realiza una rutina semanal de tres entrenamientos con una carga de tres horas por jornada. “Tengo muchas ganas de competir, y lo mejor, es prepararse para cuando todo se reanude. El mayor objetivo son los JJ.OO que fueron postergados para el 2021”, reconoció Florencia.
En lo que respecta al protocolo de entrenamiento explicó que "solo puede haber dos por cancha: la jugadora y el entrenador”. Por lo tanto, se mantiene la distancia social y en ningún momento transgrede el límite de las dos personas.
Sumado a su vida deportiva, la cañuelense desempeña estudios universitarios en la carrera de contadora pública. El lado positivo de la cuarentena es que "me permitió avanzar con los estudios, ya que pude dedicarme de lleno a la facultad”.
Pero igual se referenció al futuro de su carrera tenística diciendo que en "el tenis adaptado no tenes una fecha de caducidad, podes jugar hasta que el cuerpo y las ganas te rindan”. Y entre risas cerro diciendo “que hay Flor Moreno para rato, y vamos por más”.