El segundo gran susto pasó. Los parámetros médicos de Emily Pérez comienzan a plasmar un horizonte de evolución, dejando atrás el cuadro de dolores abdominales, fiebre y taquicardia que el jueves pasado empezaron a registrarse producto de una infección intestinal.

Ese mismo día, Emily fue internada de urgencia y sometida a un drenaje para deshinchar la zona estomacal. “Drenaron medio litro de líquido y salió limpio, con color claro y no requiere ir a quirófano. Llegaron a tiempo. Sacaron tanto líquido que ya bajo la panza notablemente y está en parámetros normales. Ahora el riñón comenzó a trabajar nuevamente”, contó en las redes su madre, Daniela Gajardo.

Cerrando el fin de semana, las noticias que llegan desde Barcelona son esperanzadoras. Los médicos españoles que atienden a la nena cañuelense están a punto de “suspender totalmente la medicación para la tensión arterial (inotrópico)...la alimentación parenteral va más concentrada porque la tolera muy bien y más rápido la infusión”, agregó.

Emily continúa siendo monitoreada en una unidad de terapia intensiva pero sus indicadores traen alivio a la familia y a los miles de cañuelenses que siguen día a día su tratamiento. “Del drenaje de su pancita hace varias horas que no sale líquido, lo que significa que sus intestinos lo están reteniendo como es lo esperable...su abdomen desinflamado. Aunque no significa que la batalla esté ganada. En terapia intensiva constantemente hay riesgos altos de complicaciones y se lucha con varios frentes”, señaló Daniela.

“Sin embargo algo es evidente y no se puede ocultar. Así lo admiten los médicos. Acá hay algo más...la fuerza que tiene esta ‘bufalita’ es sobrenatural. Sabemos de quien viene, sabemos que ha estado a su lado de mil formas, sabemos que nos sostiene a cada uno de los integrantes de este equipo… y que al Final le dará Recompensa”, confió su madre.