Este jueves por la tarde debía ingresar al Concejo Deliberante de manera formal la carta de Juntos por el Cambio que solicitaba sanciones para los concejales Maximiliano Mazzanti y Diana Barcia, ambos ediles sospechados de haber falsificado la firma de Romina Marques Antúnez, quien en ese momento se encontraba fuera de Cañuelas.
La oposición fue con la intención de conformar una Comisión Investigadora y seguir con el proceso administrativo, algo que fue descartado por el oficialismo, que aplicó la mayoría para archivar la denuncia. Para ello, el oficialismo recurrió a una maniobra controversial, donde incluyó a Mazzanti, Barcia y Antúnes, los tres concejales involucrados en la adulteración de un documento público, en la votación que pedía abrir una investigación para hallar a los responsables del hecho y sancionarlos
Dicha situación generó la indignación opositora que se levantó de las bancas y se retiró del recinto, ya que consideraron que no se seguía con lo estipulado en el reglamento interno. Además, la queja también se basó en que se les permitió a los acusados tener la posibilidad de definir si debían darle curso a la denuncia que había sobre ellos mismos. Todo estos planteos fueron descartados por la presidenta del Concejo Deliberante, Margarita Trejo que no dio lugar a ninguna de las peticiones.
Minutos después, los legisladores opositores llamaron a una conferencia de prensa donde dieron sus explicaciones de lo ocurrido y anunciaron la posibilidad de realizar una presentación en la justicia ordinaria.
En tanto que el bloque del Frente de Todos emitió un comunicado para dejar sentada su posición minutos después de la alocución de Maximiliano Mazzanti y Diana Barcia.