Enero al rojo vivo. Tras un 2019 con campañas desgastantes, todo indicaba que el primer mes del año se iba a desarrollar en el plano de tranquilidad, el descanso, los reacomodamientos naturales propios de los cambios de escenarios, entre otros factores.
Para nada. Uno de los primeros temas que ganó los pasillos fue la situación salarial de los funcionarios que formaban parte de la gestión del ex intendente Gustavo Arrieta. Por cuestiones de forma presentaron las renuncias el 22 de noviembre, pero las reasignaciones de tareas se dilataron y varios no tuvieron nombramiento hasta fines de diciembre.
El 30 de diciembre, el Concejo Deliberante trató la Emergencia Económica, Social, Sanitaria, Educativa, Administrativa y Productiva para todo el partido. Para ello, hubo varias negociaciones con la oposición, que pedía el congelamiento de las dietas de los concejales y de los funcionarios políticos.
Si bien ambos bloques no llegaron a un acuerdo, al día de hoy siguen discutiendo quien promovió la norma que salió solo con los votos del oficialismo, quien también agregó el recorte de los secretarios de los bloques del HCD.
Y lo que pareció una victoria en la discusión en el recinto se convirtió en una fuerte polémica en los distintos organismos gubernamentales. Varios funcionarios de alto rango, y otros de líneas intermedias, se molestaron por el congelamiento de sueldos por 180 días. Por lo bajo le apuntan a los concejales propios, principalmente por haber "perdido" la discusión y ceder ante "la medida demagógica de Juntos Por el Cambio", remarcó en "off" un conocedor de los pormenores del municipio a NacPop.
“En seis meses vamos a tener un sueldo que no va a llegar a cubrir la canasta básica”, explicó. Y agregó: “tenemos un montón de responsabilidades y estamos a disposición las 24 horas”.
La molestia no termina ahí, porque en los primeros días del año el gobierno anunció un bono de 4.500 pesos no remunerativo, pero los cargos políticos quedaron afuera. A este escenario se le agrega que el nombramiento de funcionarios foráneos trajo consigo sueldos más onerosos que el de los locales, además de la aprobación para poder sumar varios colaboradores.
Un área con inconvenientes internos en materia administrativa es la Secretaria de la Mujer, Igualdad de Género y Protección de la Familia y la Niñez. En el sector trabajan muchas profesionales de otros distritos que se trasladan a trabajar a Cañuelas y, ante este panorama salarial, algunos exigen cobrar una especie de lucro cesante por su profesión.
En el Concejo Deliberante hay tanta preocupación como incertidumbre. Todos los contratos (sin distinción de fuerza política) de los secretarios de bloque, administrativos y del prosecretario fueron dados de baja.
En su momento, a los trabajadores se les había explicado que las altas de quienes continuarían serían automáticas. Pero solo quedó en eso, una promesa. Lo cierto es que existe mucha preocupación entre los empleados, teniendo en cuenta que ya ha pasado en otras oportunidades que al no generarse el decreto, nombramiento o contrato, estos no percibirían los haberes correspondientes a enero.
Además, se debe sumar que sus superiores (legisladores del Frente de Todos y Juntos por el Cambio) acordaron una reducción de la planta, generando aún más dudas sobre la continuidad laboral de varios de los asesores.