Convocados por la FM88.1 Mario Villalba, de la Unión Obrera Molinera Argentina; Javier Clavero, del Sindicato de Ceramistas de Cañuelas; Mario Miceli, Secretario General de la CTA Regional Cañuelas-Lobos; Teresa de Luca, de la CTA Perón y Guido Peralta, del Frente Estudiantil Cañuelas; se dieron cita en una mesa que opinó, analizó y debatió todo lo ocurrido con la movilización de la CGT de este martes y sus futuras consecuencias.
Mario Miceli, de la CTA explicó que “hubo una gran movilización de los trabajadores y de Cañuelas en particular. Si el Gobierno no para con la prepotencia el paro nacional hay que hacerlo. En 22 años de militancia que tengo nunca vi tantos reclamos a la cúpula de la CGT”. En relación a lo que viene aseguró que “desde la CTA ya estamos construyendo la segunda marcha federal y un 1° de Mayo muy callejero. Los trabajadores de base hemos cumplido con nuestra tarea de discutir pero la cúpula de dirigentes no, el triunfo es de ellos buscando la unidad por más que no haya salido la fecha del paro y el único perdedor es el Gobierno. Tenemos que trabajar en la unidad y golpear, con un solo puño, a un gobierno muy poderoso, de la derecha más rancia” sentenció.
En tanto que Guido Peralte, del FEC, afirmó que “nunca había visto una manifestación de semejante magnitud, con tanta diversidad y con un mensaje tan claro al gobierno. Ante la falta de respuestas del triunvirato de la CGT se dio esta situación y posteriormente el aprovechamiento político para perjudicar a un partido y beneficiar al oficialismo. La marcha fue importante para que los dirigentes gremiales y políticos tomen nota de que el pueblo no se está sintiendo representado. Ayer había muchos votantes de Macri movilizados, desilusionados porque el cambio que votaron no era este. Celebro que haya sindicatos con conciencia de clase, que cuando no se sienten representados por sus dirigentes agarren las banderas y busquen representarse ellos mismos”. Peralta recalcó que “tiene que haber un proyecto que represente a toda la clase trabajadora”.
Uno de los dirigentes más críticos fue Mario Villalba, representante de la UOMA, que sin pelos en la lengua aseveró que “ayer hubo un estallido social. No es falta de representación sindical, sino política. El triunvirato de la CGT no quería hacer un paro y los discursos fueron flojos y mediocres. Los que se subieron al escenario no eran de partidos políticos, es gente que no da más. Las bases no llegan a fin de mes”. De cara al porvenir aseguró que “tienen que juntarse todos y pelear todos por los laburantes. Se tienen que dar cuenta que están desamparando a la gente”.
Javier Clavero, de Ceramistas, afirmó que “los medios quieren desprestigiar a un sector político y juegan a favor de otro. Sino no se entiende la cantidad de despidos en el sector público y privado y que hayan hecho silencio. Si los representantes gremiales no están a la altura la próxima le van a prender fuego el escenario con ellos arriba”. Después opinó que “el gobierno no está contento con esto, al contrario, está preocupado. El triunvirato de la CGT no representa a nadie y si tienen dignidad tienen que dar un paso al costado. Son socios de este gobierno y su plan sistemático de empobrecimiento. Espero que hayan entendido el desborde de la gente que está cansada”.
Por último, Teresa de Luca, integrante de la CTA Perón aportó que “nos faltó saber quién puede conducir en el ámbito sindical algo que estalla por todos lados con el hambre, la desocupación y la mala situación de los jubilados. Salir a la calle fue una ganancia para los trabajadores y la falta de representación sindical es la pérdida. Creo que hay una crisis de representación en los sindicatos y hay que construir y seguir trabajando en los barrios para generar nuevos referentes”.
