Este sábado a las 3:30 de la mañana, la policía desarticuló una fiesta clandestina en un lavadero ubicado en Saavedra y Ruta 205, a metros de la estación de servicio YPF "La Parrilla".
Según la versión de los voceros oficiales, un vecino llamó al 911 para denunciar una reunión "a todo trapo", con música, alcohol y hasta picadas de motos. Al llegar, los efectivos confirmaron que en las instalaciones había más de 50 personas de ambos sexos disfrutando de una fiesta. Los concurrentes al detectar la presencia policial comenzaron a dispersarse rápidamente pero los agentes lograron interceptar a cinco de ellos, quienes con los recaudos pertinentes de Covid, fueron identificados como Antonio Leopoldo Rico (49), Manuel Oscar Gómez (23), Bruno Ezequiel Ramallo (26), Pablo Beber (28) y Alan Martín Oviedo (25).
Los cinco fueron aprehendidos por violar el decreto presidencial para impedir la propagación de una pandemia (Art. 205) y resistencia a la autoridad (Art. 239). La policía procedió al secuestro de un parlante portátil y varias bebidas: cuatro gaseosas Manaos, cuatro vinos Termidor, dos botellas de vino blanco dulce, una gaseosa Sprite, una Mariposa, un jugo multifrutal y una bolsa de hielo.
Además, se incautó un cuaderno con los nombres de cada uno de los asistentes a la fiesta, separados en hojas por hombres y mujeres. Dentro de la ilegidad de la juntada se ve que los organizadores quisieron minimamente respetar parte del protocolo sanitario que se aplica en actividades habilitadas, pero en este caso sirvió solamente para que el juzgado de turno que entenderá en la causa tenga los nombres de todos los que incumplieron las normas.