Una vecina del barrio Los Aromos alertó la maniobra y evitó ser una víctima de los delincuentes. 

Jhoana Jiménez, de 36 años, recibió este sábado un llamado al teléfono fijo de su casa. Una voz masculina se presentó como personal de Tarjeta Naranja, Master Card y Visa. Dió nombre y apellido de la dueña de casa y comenzó la charla. 

"Me llamaron supuestamente de Tarjeta Naranja para corroborar unos datos por un supuesto reintegro de dinero por un producto solicitado que, ya de hecho, yo no lo tenía. En paralelo quiso saber con cual otras entidades estaba operando", indicó la mujer.

Al percatarse de que se trataba de, al menos, una situación dudosa, la señora le hizo una serie de preguntas que el estafador no supo contestar.  "Me pedía los datos de una de las tarjetas. No sabía precisar de que sucursal me estaba llamando. Se hacía llamar como Carlos Florez, con Z me remarcó. Y supuestamente me dió un número de matrícula 3222-A".

El falso operador señaló que la llamada se debía al reembolso de un monto a favor del cliente, ya que por error habían debitado el valor de un servicio que no le pertenecía. 

"Le dije que yo no tengo ni pedí ningún servicio y me dijo: 'acá figura en el sistema que usted tiene una entrega de unas revistas, si quiere puede hacer el reclamo porque no le llegaron y hacemos el reintegro. Me pedía los datos de la tarjeta", agregó.

"Se abatato ante mis preguntás y se dió cuenta que no me pudo envolver". Pero seguía insistiendo: "le dije que no quería nada y me dijo que 'bueno,  páseme el  numero de tarjeta  así podemos hacer efectivo el reclamo".

"Vos me queres estafar", denunció la señora en los últimos segundos de la conversación. Ante esas palabras el delincuente desistió y colgó. 

En caso de obtener solo los datos del frente y dorso de la tarjeta, los delincuentes podrán realizar compras por internet y abonar servicios de manera online. 

Hay que tener en cuenta que ni las entidades financieras, ni VISA o MasterCard u otro operador de tarjetas, solicitan datos personales a sus clientes o verificación de sus cuentas, mediante correo electrónico, mensaje de texto o vía telefónica, a menos que el usuario haya sido quien contactó primero a la institución financiera.