Luego del triunfo 1 a 0 de Independiente sobre Vélez en el estadio Libertadores de América, la policía bonaerense desató una cacería humana. Los efectivos recibieron la orden de bajar una bandera que estaba colgada del alambrado y mientras abandonaban la tribuna comenzaron una brutal represión.
Jorge Leguizamón, de 56 años, es vecino de Cañuelas y llegó a Avellaneda con el hijo de 27, la hija de 22 y una amiga de esta. Damián, hijo de Jorge, en dialogo con la Fm88.1 contó que “todo empezó por la bandera. Cuando iba a terminar el partido vinieron directamente a reprimir y no les importó nada. Empezaron a tirar balazos de goma donde había chicos, mujeres y gente grande. Nos reprimieron de la nada, como si fuéramos delincuentes".
"En los últimos partidos de local la policía nos viene provocando constantemente. Nos dijeron que si nos molestaba lo que está pasando que no vayamos más con la familia”, agregó.
En su relato detallado, Damián sumó que “después de salir de la tribuna se escondieron detrás de un paredón y le tiraron a todo lo que se moviera. Luego la siguieron en la calle. A mí papa le pegó en la pierna el balazo cuando íbamos saliendo por el playón". 
Le herida en la pierna de Jorge Leguizamón.
Los hinchas coinciden en que la modalidad represiva y el tono de provocación de los organismos de seguridad se ha agudizado en los últimos tiempos porque "antes esto no pasaba, ahora con (Hugo) Moyano como presidente esto pasa cada vez más... y hasta que no muera alguien esto no va a parar”, aventuró el joven que dio cuenta que en el partido ante Atlético Tucumán de local hicieron salir al público del Diablo por una puerta casi sin luz y entre los palazos de los encargados del operativo.
La popular Sur del “rojo” es ocupada por los socios y la familia de Independiente, ya que la barrabrava se ubica en la norte. Allí, debido a los malos arbitrajes de las últimas fechas, los hinchas decidieron colocar una bandera que decía “basta de AFAno”, en clara alusión a los jueces y a la Asociación del Fútbol Argentino.
Luego de que el trapo estuviera puesto todo el encuentro, la Policía Bonaerense, que responde al ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, Cristian Ritondo, montó un operativo e ingresó violentamente a la tribuna para retirarla. El accionar no quedó allí si no que se extendió a los egresos e inmediaciones del estadio donde siguieron reprimiendo.
Los vínculos políticos entre los organismos de seguridad de la provincia se extienden a la AFA y nadie duda que desde algún nicho de poder partió la orden para que retire la bandera cueste lo que cueste. Nadie duda del nivel de influencia de Daniel Angelici, presidente de Boca Juniors y hombre clave en Cambiemos, para digitar todo lo que por estos días hace al show del fútbol argentino. "No solo es por Independiente sino un mensaje para todos lo que pasó ayer (por el domingo)", le comentó a este medio alguien que maneja información de la sede de Viamonte.
Por lo pronto el cañuelense herido se recupera favorablemente y desde su familia aseguraron que este miércoles acudirán a una convocatoria de los hinchas a la sede del club para reclamar por los últimos acontecimientos ocurridos.
