El pasado miércoles 12 de junio, Ramón Giagnoni, de 51 años, se roció con combustible y se incendió a lo bonzo en la entrada de la dependencia policial.
Tras ingresar en llamas a la guardia de la comisaría, el técnico en refrigeración regresó a la calle, donde los efectivos policiales lograron, con un matafuego, extinguir el fuego que lo envolvía.
Fue asistido en la vía pública por los bomberos voluntarios y por médicos de AYMED y el SAME local. Posteriormente fue derivado de urgencia al Hospital Regional Cuenca Alta “Néstor Kirchner”.
Giagnoni fue ingresado a la unidad de terapia intensiva, donde se constató que tenía quemaduras de tercer grado en el 60% del cuerpo.
El estado era crítico. Superó las primeras horas que habían sido catalogadas como cruciales y fue sometido a varias cirugías de injerto de piel.
Lamentablemente, en el decimosexto día de tratamiento el cuadro se tornó irreversible y Giagnoni falleció este viernes, pasado el mediodía.