Como en 89 municipios de la provincia de Buenos Aires y en gran parte del país, este martes comenzó en el Hospital Regional Néstor Kirchner la campaña de vacunación contra el coronavirus, con la aplicación del primer lote de la “Sputnik V”, destinada al personal de alta complejidad y posteriormente a los trabajadores médicos en general de los dos hospitales de Cañuelas. Tras la aplicación de la primera dosis, 21 días después se debe inyectar la segunda dosis, definitiva para lograr alcanzar el 91,4% que garantizó la vacuna rusa durante la fase tres de ensayos clínicos.
La segunda fase será para grupos de riesgo por comorbilidades y adultos mayores. En el ámbito local habrá dos centros de vacunación, localizados en la Escuela Industrial de Cañuelas y la Escuela Secundaria Nº 1 de Máximo Paz.
La primera en recibir la vacuna en Cañuelas fue Eva Rodríguez, médica de terapia intensiva del Hospital Cuenca Alta, quien consideró a la vacuna como una herramienta más para poder continuar la lucha contra el coronavirus. “Estoy emocionada. Nosotros somos soldados y la vacuna es un arma más para seguir trabajando. Vacunarse es una responsabilidad social con el que está al lado nuestro. Es necesario, que no tengan miedo”.
La secretaria de Salud de Cañuelas, María Delia Pené, aseguró que “es un día histórico, es un día que hemos estado esperando hace mucho tiempo. Esta pandemia ha sido muy dura para el personal de salud, con un nivel de adrenalina mayor al que estamos acostumbrados. Estamos emocionados, se me cayeron algunas lágrimas”.
Roxana Cravero, enfermera del servicio de Emergencias del Cuenca, relató que ya tuvo Covid “pero que estaba interesada en recibir la vacuna para generar los anticuerpos. No dolió nada, estoy de 10.
Previo a la vacunación los médicos y enfermeros debieron realizar un proceso de preinscripción y completar un breve cuestionario de salud. Una vez aplicada la dosis los vacunados deben aguardar en observación por un período de 30 minutos por si se presenta alguna reacción adversa.