El martes, a partir de las 14hs, el sector de aceite de Molino Cañuelas detuvo su producción en el marco de un paro del gremio de aceiteros en reclamo de la reapertura de la negociación salarial.

Lo cierto es que la Federación que nuclea a los trabajadores de la industria aceitera de la República Argentina convocó a un paro por tiempo indeterminado a partir de la tarde del último martes.

El plan de lucha había arrancado con una huelga y afectó a todas las plantas aceiteras del país.

Según La Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina "la protesta se realizó debido a que las cámaras empresariales del sector se niegan a la revisión de la escala salarial prevista para el mes de agosto pasado”.

El gremio justificó la huelga en “la provocación por parte de la representación patronal de las cámaras CIARA, CIAVEC y CARBIO al negarse a la revisión de la escala salarial prevista para el mes de agosto pasado”.

Desde el sector empresario sostienen, si bien el aumento del 25% acordado en abril contiene una cláusula de revisión en agosto, que “la inflación de este año aún no superó el incremento salarial”.

Este miércoles, la medida fue levantada debido a la intervención del Ministerio de Trabajo que decretó la conciliación obligatoria y se abrieron los canales de dialogo institucionales correspondientes, e instantáneamente las fabricas volvieron a producir.

Lo cierto es que las industrias plantean revisar la pauta salarial en diciembre, y, por su parte, los trabajadores tienen como objetivo llevar el incremento para este año a un 48% de aumento.
Según informó el gremio, el Convenio Colectivo de la actividad para un salario inicial de $68.678 es "inferior al necesario para asegurar una vida digna a los aceiteros y aceiteras".

El martes vuelven a reunirse las partes y se definirán los pasos a seguir.